Poner la oreja puede ser tildado de mala costumbre, pero con el paso del tiempo todos aprendemos que el que no tiene la oreja puesta, no se entera del aviso de salida del tren.
Escuchando empiezan nuestros días, así aprendemos a comunicarnos y es bien sabido que la comunicación es la clave de la evolución de la raza humana.
Así que pon la oreja a pesar de lo que digan los que no escuchan, ponla y aprende, no hay peor destino que la ignorancia.
A día de hoy corre una ligera brisa que se agradece después de los insólitos y calurosos días que nos vistan.
mmmm...un blog muy curioso en el que apetece curiosear
ResponderEliminargracias Kati!!
ResponderEliminarQue razon tienes si no te vuelves radio macuto que es como le llamo yo a poner la oreja no te enpanas de muchas cosas.
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